ElDiario.es: la soledad no deseada afecta a uno de cada cuatro jóvenes en España
La soledad no deseada, anteriormente vinculada a la población mayor, afecta de manera más intensa a la juventud, según un estudio de la Fundación Once y Ayuda en Acción y de la que se han hecho eco desde ElDiario.es en esta noticia. Un 25.5% de los jóvenes de 16 a 29 años en España se siente solo, y el 75% ha experimentado este sentimiento por más de un año. Factores como la falta de estabilidad económica y laboral, junto con la presión académica, se relacionan con la soledad juvenil. El estudio destaca la persistencia de este problema en el tiempo, afectando a la mitad de quienes lo experimentan durante más de tres años.
Las cifras revelan que la pobreza y el desempleo están en el centro de la problemática, ya que la prevalencia de la soledad es el doble entre aquellos con dificultades económicas en comparación con quienes llegan fácilmente a fin de mes. La carencia de una trayectoria laboral y la falta de un título para trabajar en lo deseado también influyen significativamente en la soledad, con una mayor incidencia entre quienes han repetido curso. A nivel educativo, se observa que a mayor nivel, hay menos soledad.
El estudio subraya la necesidad de abordar la soledad juvenil como un fenómeno complejo y multidimensional. Además, destaca la relación entre la salud mental y la soledad, con el 80% de los jóvenes que se sienten solos experimentando problemas de ansiedad. También se advierte una mayor prevalencia de la soledad entre personas del colectivo LGTBI, migrantes, y aquellos con discapacidad.
El impacto de situaciones como el acoso escolar o laboral en la sensación de aislamiento es evidente, con una frecuencia alta de estas experiencias entre la juventud. A pesar de contar con amigos, pedir ayuda por este motivo resulta incómodo, y solo una de cada tres personas se siente cómoda compartiendo su soledad. En la etapa de la juventud, las amistades influyen significativamente, pero es importante diferenciar la soledad del aislamiento social. El estudio destaca que la calidad de las relaciones familiares tiene más impacto en la soledad que la cantidad.
En una era de teletrabajo y redes sociales, el estudio desmonta algunas hipótesis, como la idea de que las personas en grandes urbes o pequeños pueblos podrían sentirse más solas. La mayor concentración de estos sentimientos se observa en jóvenes de municipios de tamaño medio (de 50,000 a 500,000 habitantes). Además, no hay una relación directa entre la soledad y la emancipación tardía, ya que aquellos que viven con sus padres o tutores tienen menos sentimientos de soledad que los que viven en un piso compartido o en su propia casa.